GEDEON REHUSÓ SER CORONADO REY

GEDEON REHUSÓ SER CORONADO REY

He aquí la historia de un valiente soldado que después de haber librado resonantes batallas en defensa de su pueblo, rehusó la corona, diciendo: “No seré señor sobre vosotros, ni mi hijo os señoreara” (Jue; 8.23). La negativa anterior es heroica, máxime cuando el pueblo a una sola voz le decía: “Sé nuestro señor, tu y tu hijo, y tu nieto; pues que nos has librado de la mano de Madian” Sin embargo, todo lo rechazo por una sola razón: quería dar la gloria a Dios, diciendo: “Jehová señoreara sobre vosotros” (Jue; 8.23).

¡Estratega formidable fue Gedeon! No gustaba de las muchedumbres. Selecciono a 300 muchachos y con ellos defendió a su pueblo. Al atacar al enemigo procuro evitar el derramamiento de sangre, dando ataques relámpagos con ruido de bocinas y antorchas encendidas. En otras palabras, corría el enemigo infundiéndole temor...En esto hay una cualidad: hay que ganar las grandes batallas procurando ser generosos con el adversario. Así, con gritos, toques de bocina y vivas a Gedeon y a Jehová, aseguro por largos años la libertad de su pueblo. Muy distinto este sistema empleados por Aod y Sangar. Al ver semejantes actos de violencia que la Biblia narra peor nunca aplaude, mi pluma se negó a escribir las semejanzas de tan Bárbaros guerreros. Mejor las batallas, al estilo de las planeadas por Gedeon. Son batallas cereales, donde a la vez actúa el corazón.

La fe de Gedeon es, sin duda alguna, la más grande de sus cualidades. Siempre dio la gloria a Dios en todos los actos de su vida. No quiso ceñir corona porque esta correspondía a Dios, su amigo e inseparable compañero de la vida. Con él platicaba, le pedía explicaciones, pruebas; a veces dudada, peor su duda nunca llego a la incredulidad. Al sentir la voz de Dios resonar dentro de su ser, como tomas, gritaba: “Señor mío y Dios mío”. Un día edifico un altar y sobre él adoro. Al oír la narración del sueño que un soldado medianita hacia a su amigo “adoro”; y vuelto al campamento. Dijo: “Levantaos, porque Jehová ha entregado el campamento de Madian en nuestras manos”.